jueves, 10 de junio de 2010

Notas a pie de página sobre Cantando bajo la lluvia.

  • El productor Arthur Freed, responsable de más de 40 producciones musicales para la Metro desde 1939, se valió de 2 fuentes de inspiración para la pelícua: en primer lugar las canciones escritas por Nacio Herb Brown y él mismo entre 1926 y 1932, entre ellas la popular Singin'in the Rain. En segundo, sus propias vivencias en el oficio, desde sus inicios como artista de variedades. De muchas de sus anécdotas se extrajeron situaciones que se utilizarían en el argumento de la película.

  • De los tres actores principales -Gene Kelly, Donald O'Connor, Debbie Reynolds- que son presentados en los títulos de crédito, sólo Debbie Reynolds carecía de experiencia en el baile. Sus relaciones con Gene Kelly durante la filmación fueron bastante tirantes. el bailarín la consideraba bastante patosa en las secuencias musicales. Tanto O'connor como Kelly tenían una amplia carrera en espectáculos y películas musicales. Debbie Reynolds fue una imposición del productor Arthur Freed, y debido a sus problemas con el baile se optó por eliminarla del ballet final.

  • El productor no quiso utilizar la verdadera voz de Debbie Reynolds, una novata de 19 años, e hizo que todas sus canciones fueran dobladas por Betty Noyes. Irónicamente, la voz que Debbie Reynolds presta a Jean Hagen, la starlette de físico imponente y voz imposible, en la escena final tras el telón es ... la de la propia Jean Hagen.

  • En el extraordinario número musical Make them laugh, un acrobático Donald O'Connor baila por paredes, suelos y techos. Esta secuencia, al igual que otras musicales de la película sigue una secuencia aparentemente espontánea, pero en realidad muy estructurada: 1/ diálogo hablado; 2/ introducción musical ;3/ canción; 4/ golpe de efecto final. El número de Cosme es todo un homenaje al cine cómico mudo. Ahí está el inconfundible sombrero hongo indisociable al personaje de Charlot, todo el repertorio de caidas, acrobacias (Keaton era todo un acróbata) y golpes para ese humor visual tan característico del periodo mudo, basado en la expresión y el gesto.





  • La coreografía de la famosa canción Singin 'in the Rain se le ocurrió a Gene Kelly. En principio, se tenía previsto que fuera una canción sin baile, pero después de repetir varias veces la letra, Kelly propuso la inclusión del baile bajo la lluvia inspirándose en un número cantado por Maurice Chevalier en Folies Berger (Roy del Ruth, 1935). La canción había sonado ya en los títulos de crédito iniciales presentando a los tres personajes principales, y volverá a aparecer al final. Su introducción en la trama es, una vez más, un ejemplo de cómo el tándem Donen / Kelly entendían el musical: Don (Gene Kelly) está exultante de felicidad porque la película se va a salvar y sobre todo porque Kathy (Debbie Reynolds) le ama. Cuando se despiden, ella le dice: esta lluvia de California es hoy más copiosa que otras veces, a lo que Don responde: para mí todo es luminoso y el sol brilla por todas partes. Antes de finalizar la conversación en la puerta de la casa de Kathy se inicia la melodía que da paso de manera natural y fluida al número musical. Los movimientos de Don, su forma de decir al taxista que se vaya, tienen también un planteamiento musical.

  • El lujoso y espectacular número final, Broadway Melody, se rodó con la película ya finalizada y ya sin posibilidad de contar con Donald O'Connor, que tenía un contrato para intervenir en un show de TV. El problema era que Gene Kelly pensaba que el número le venía grande a Debbie Reynolds. Al final Kelly recurrió a una memorable Cyd Charisse con un look a lo Louise Brooks, como la chica de un gángster que parecía inspirarse en el Scarface de Hawks. Cyd era una joven bailarina que había trabajado en películas musicales de la Metro. El ballet se ensayó durante un mes, tardó dos semanas en rodarse y costó casi medio millón de dólares.

  • Los números musicales de Cantando bajo la lluvia siguen las pautas que revolucionaron el género musical de la mano de Stanley donen y Gene Kelly. Las canciones no aparecen de forma brusca, sino como continuación de un desarrollo natural. El diálogo se acelera, se hace cortante, los actores con sus movimientos y sus gestos nos introducen en el baile, la música entra en un segundo plano, la voz se transforma en canto, los movimientos, en baile.

1 comentario:

Odile dijo...

Para mi en los musicales lá música y el baile han de fluir dentro del desarrollo de la película sin fraccionarla. Me encanta "Cantando bajo la lluvia" es un musical que me llena de energía positiva.

Un beso que canta y baila